Paradigma de la complejidad. Análisis de Carlos Delgado

Carlos Delgado, rector de Multiversidad Mundo Real

En el articulo Los caminos del paradigma de la complejidad, habíamos realizado un análisis de los caminos, de forma resumida se dijo lo siguiente:

Los caminos del el paradigma de la complejidad: filosófico, científico y cosmovisivo. Donde cada uno representa los diferentes caminos para la transformación del pensamiento humano.

  • Pensamiento complejo: El camino de la sabiduría (las ideas que rigen el mundo). La filosofía de la complejidad nos ensena a pensar a comprender la complejidad del mundo, a superar el pensamiento reduccionista, lineal, cognitivo (el método)
  • Ciencia de la complejidad: El camino del conocimiento (las leyes que rigen el mundo). La demostración de los fenómenos complejos y su generalización. La ciencia de la complejidad nos ensena a razonar a comprender las leyes de la complejidad, busca superar las formas de comprender las leyes del conocimiento  y descubrir nuevas leyes y forma de superar las ciencias vigentes (paradigma de la ciencia).
  • Cosmovisión de la complejidad: El camino de la acción (las interacciones que rigen el mundo). La actuación ante los problemas cada vez más complejos y cómo enfocarnos ante cada tipo de problemas. La cosmovisión de la complejidad nos ensena a actuar a comprender las relaciones y las   posibles alternativas al paradigma tecnologista  y confrontar las cosmovisiones modernas, busca superar los problemas actuales desde una cosmovisión que le encuentre solución a los problemas contemporáneos y supere el pensamiento individualista y competitivo actual (se concentra en el sujeto, en su lucha por cambiarse a sí mismo y al mundo)

Las 3 de alguna forma nos enseñan a superar las formas de pensamiento actual y a construir una nueva forma de comprender, analizar y actuar en el mundo, que garantice una transformación (metamorfosisI) de la humanidad

En dicho artículo se hacia un análisis del paradigma de la complejidad partiendo de las ideas de Maldonado y y Luengo, pero me faltaron las ideas de Carlos Delgado.

En su libro “Hacia un nuevo saber”, Premio Iberamericano de Etica, Elena Gil (2005) y más recientemente en el diplomado que imparte en Multiversidad, “Pensadores del Sur”. Veamos como Delgado, trata el tema del paradigma de la complejidad.

Paradigma de la complejidad

Del ideal de simplicidad al ideal de complejidad (Delgado, al igual que Luengo y Maldonado, lo clasifica en tres caminos, con lo cual coincido)

a) La complejidad como ciencia

El desarrollo de nuevos métodos, propiciados por las técnicas de cálculo computarizado, permitió trabajar estos datos y manejarlos en modelos computacionales. La complicación del comportamiento observado condujo a la búsqueda de un término adecuado, y al no encontrarse en el arsenal lingüístico de la ciencia uno conveniente, se apeló con audacia a la noción antigua del caos o desorden. En realidad, la metáfora estaba llamada a suplir la ineficacia de los conceptos establecidos, y aunque generó cierta euforia cuasi mítica en torno al desorden como propiedad de la naturaleza, tuvo el resultado conceptual más efectivo y perspectivo de introducir la idea del determinismo caótico, una forma de determinismo absolutamente «no clásico» y desconocida para el pensamiento anterior. Entre las propiedades de los sistemas deterministas de este orden, se encuentra la manifestación de una singular dependencia de estos con respecto a las condiciones iniciales, lo que ha sido expresado metafóricamente con la denominación «efecto mariposa». Pero no solo el «caos» o tendencia al desorden, sino también el «anticaos» o tendencia al orden como resultante. Junto a esto, la manifestación de una propiedad sumamente importante: la imposibilidad de predecir –con la «exactitud» propia de la causalidad lineal predominante en el ideal de simplificación– los estados futuros del sistema. No porque falte conocimiento o se carezca de instrumentos para realizar las mediciones exactas, sino porque el sistema es impredecible en tanto se está haciendo, es devenir que se realiza, y su estado futuro dependerá de las condiciones de posibilidad del pasado –representadas en las «condiciones iniciales»– y del presente –los constreñimientos con que se encuentra el sistema. Asimismo, el papel de los nexos de retroalimentación en los sistemas complejos.

La naturaleza no lineal de los sistemas, la ruptura de la simetría del tiempo, y la singular propiedad de crear y mantener estructuras ordenadas en condiciones muy alejadas del estado de equilibrio a partir del aprovechamiento de flujos energéticos vinieron a cerrar un ciclo de comprensión de estos sistemas con una idea más: la generalización y extensión de la nueva comprensión al conjunto de los sistemas naturales. Lo que aparecía al principio como propiedad de algunos sistemas singulares en estudio, comenzó a verse –cada vez con mayor frecuencia– como una propiedad de sistemas naturales ordinarios y, definitivamente, como una propiedad singular de la naturaleza en su conjunto. Son indudables las consecuencias de estas investigaciones para la comprensión y tratamiento de  onceptos filosóficos generales como el tiempo, la realidad, la estabilidad y el cambio, la determinación y la  causalidad; el descubrimiento del énfasis realizado por la ciencia en la estabilidad como propiedad de la naturaleza, lo que le impedía captar los procesos de cambio que tenía ante sí.

Se han realizado estudios concretos dotados de una efectiva capacidad explicativa,32 aunque la extensión de este conocimiento a la naturaleza en su conjunto ha resultado una hipótesis más difícil, pues implica superar las barreras disciplinarias del saber. Se ha establecido que la dinámica subyacente en numerosos procesos naturales, incluidas las actividades humanas, son similares; de modo que los discernimientos que se obtienen en sistemas relativamente simples se pueden aplicar a actividades más complejas.33 Los avances más destacados en esta dirección se relacionan con la elaboración de una nueva comprensión de la evolución y la vida en la Tierra y el Universo, la naturaleza y esencia de la vida, y su relación con la mente y la materia. Entre los nuevos elementos de conocimiento, se encuentran varios conceptos –sistemas dinámicos autorregulados, no linealidad, emergencia, autoorganización, sistemas dinámicos adaptativos– que han ejercido una notable influencia en la cosmovisión y la metodología. Además, se ha refutado una serie de presupuestos científicos propios del paradigma de simplificación.

En mi opinión el máximo representante en Latinoamerica de la ciencias de la complejidad es Maldonado

b) La complejidad como método de pensamiento

En la bibliografía contemporánea, se pueden constatar dos usos del concepto pensamiento complejo. Uno, lo hemos analizado en el epígrafe anterior. La distinción de la cibernética de primer orden (pensamiento del objeto) y la cibernética de segundo orden (pensamiento del observador) conduce al uso del término pensamiento complejo para hacer referencia a los desarrollos conceptuales relacionados con esta cibernética de segundo orden con la superación del postulado clásico de objetividad. Otro se refiere a la construcción de una metodología basada en los avances alcanzados por los estudios de la complejidad como ciencia. Este ha sido el camino emprendido por el conocido investigador Edgar Morin.

La obra de Edgar Morin se caracteriza por el uso coherente y sistemático del concepto «pensamiento complejo» y una marcada orientación hacia la superación de las dicotomías y las divisiones disciplinarias del saber. Su objetivo es la búsqueda del método de pensamiento complejo como antimétodo, ruptura con los ideales metodológicos aristotélicos, kantianos y cartesianos.

El método se distingue de las versiones aristotélica, kantiana y cartesiana, pues no se le concibe como instrumento o mediador en la relación cognoscitiva entre dos entidades separadas –sujeto y objeto– ni como garante de certeza, sino como expresión de intencionalidad que reconoce límites y posibilidades a la actividad cognoscitiva.

A diferencia de Aristóteles –que presentó el método como organon, instrumento asociado a la lógica formal y la búsqueda de medios, caminos y herramientas para alcanzar un objeto separado–, Descartes – que vinculó la noción instrumental a la búsqueda de la certeza– y Kant –que lo concibió como canon, como criterio o parámetro de validez, marco en el que se establecen las relaciones entre el sujeto y el objeto–, Morin presenta un método anti separación, anti instrumentalización, anti certeza. Ubicado en el contexto de la revolución científica del siglo xx, parte de que el problema del conocimiento del mundo se ha convertido en una necesidad intelectual y vital que atañe a los habitantes del planeta, ubicados en un contexto que no es local o aislado, sino global y planetario. Su propuesta metodológica intenta producir una verdadera reforma del pensamiento, una reconstrucción del tejido conjunto; propone vincular y distinguir sin desunir, en-tender el universo como relación dialógica entre orden, desorden y organización; y al unir –contextualizar y globalizar–, recoger el reto de la incertidumbre.

Morin toma como punto de partida la crítica a la construcción moderna del saber y se apoya en los nodos conceptuales aportados por los estudios de la complejidad y las nociones epistemológicas de ruptura que hemos analizado en los epígrafes anteriores.

El antimétodo se presenta como una edificación de varios pisos. En la base se encuentran los desarrollos conceptuales provenientes de la teoría de la información, la cibernética y la teoría de los sistemas –teorías que aportan conceptos esenciales como información, retroalimentación y las lecciones sistémicas sobre la relación parte-todo. El segundo nivel está constituido por las ideas de la autoorganización –desarrolladas en las versiones de J. von Neumann, H. von Foerster, H. Atlan, I. Prigogine. Y el tercer nivel está integrado por tres principios esenciales: el principio dialógico (la solución de una contradicción no está en la eliminación de los contrarios, sino en la consideración de lo contrario, la unión de las nociones antagónicas), el principio de recursión organizativa (no solo retroacción –feedback–, sino producción y autoorganización, la red de autoproducción y compenetración de efectos sobre sí

mismos), y el principio hologramático (que implica pensar una nueva relación parte-todo, donde la parte está en el todo, y el todo está en la parte). Además de la monumentalidad, la originalidad terminológica y conceptual la obra de Morin y su propuesta metodológica se han distinguido por el tratamiento de urgencias prácticas en la investigación en el terreno de la educación y la sociología. Uno de sus textos más conocidos ha sido Los siete saberes necesarios a la educación del futuro, publicado por la UNESCO y ampliamente debatido en el año 2000 en el seno de la comunidad internacional. En él plantea una reforma de la educación y la ciencia que tiene como puntos de partida las exigencias del antimétodo y la valoración de siete vacíos de la educación contemporánea, donde presenta importantes problemas epistemológicos y éticos que afectan a la humanidad en su conjunto.

Para mi entre los máximos exponentes en latinoamerica del pensamiento complejo, se encuentra Carlos Delgado.

c) La complejidad como cosmovisión

El desarrollo de las investigaciones de la dinámica no lineal y los debates epistemológicos y metodológicos han tenido un profundo impacto cosmovisivo. Las ideas de la complejidad han traído consigo una reevaluación del holismo, al orientar la investigación hacia el estudio de la totalidad y la consideración de las propiedades emergentes que aparecen en ella. Asimismo, se ha reconsiderado críticamente el reduccionismo como metodología y como procedimiento de indagación. Viejas nociones que contraponían de manera absoluta lo simple y lo complejo han resultado desplazadas; y simultáneamente con ello, se ha reafirmado la contraposición de lo simple y lo complejo en tanto ideales. La idea de la complejidad del mundo se ha venido abriendo paso, y con ella se han cuestionado ideales modernos –como el de objetividad y dominio del hombre sobre la naturaleza– profundamente arraigados en el pensamiento occidental; en su lugar se ha propuesto la concertación de una «nueva alianza» (Prigogine), un nuevo diálogo del hombre con la naturaleza, pues el determinismo, la causalidad y la certidumbre tienen límites impuestos por la creatividad de la naturaleza.

En el tratamiento de lo complejo es importante distinguir –como ha mostrado Maldonado– los planos gnoseológico y ontológico de la complejidad. Si desde una perspectiva gnoseológica el problema de la complejidad es el del pensamiento de la realidad, en el plano ontológico tenemos ante nosotros el problema de la naturaleza de la realidad. Ambos problemas forman una unidad indisoluble, puesto que en especial algunas de las ideas más inquietantes como la autopoiesis, han replanteado el problema filosófico de la artificialidad del mundo del hombre y la identificación del ser y el conocer en un proceso único. La tesis dialéctica que afirma que no hay objeto del conocimiento sin sujeto del conocimiento se ha profundizado en dirección al sujeto y a su contexto de interacción con el objeto. «El conocimiento implica un sujeto que conoce y no tiene sentido o valor fuera de este» (Le Moigne), o como ha planteado Von Foerster, se hace necesaria «una epistemología que dé cuenta de sí misma», que sea responsable a lo interno del sujeto. El asunto de la complejidad no es solo externo –el del conocimiento de una realidad exterior, naturaleza, entorno, mundo–, es simultáneamente interno; implica un sujeto que conoce desde ciertas condiciones contextuales y carece de sentido o valor fuera de esto.

Este es un planteo radical del problema de la relación entre conocimiento y valor que debemos considerar. El conocimiento es conocimiento en la medida en que el sujeto le atribuye algún valor. Entonces, la realidad es una realidad en actividad donde el sujeto construye su experiencia de la realidad a través de representaciones simbólicas. Dicho en términos bachelardianos: «Nada está dado, todo es construido.»37

El ideal de racionalidad clásico pensó el sujeto como entidad absoluta y trascendental separada del objeto. Los desarrollos de la dialéctica y el enfoque sociocultural de la ciencia y el conocimiento lo pensaron como sujeto relativo y concreto, histórico y social. El paradigma de complejidad emergente lo ha comenzado a pensar como ente reflexivo que da cuenta de sí. Desde esta perspectiva, no existe una barrera infranqueable entre estas posiciones que han venido desarrollándose paulatinamente como sucesivas rupturas con los ideales clásicos, en especial con aquel que separaba dicotómicamente conocimiento y valor. El conocimiento no solo es un valor en sí mismo, sino que adquiere sentido como conocimiento en tanto valor. La propuesta no consiste en sustituir la barrera que separaba infranqueablemente lo objetivo de lo subjetivo por un puente de subjetivismo absoluto. De lo que se trata es de comprender la naturaleza artificial, construida, de los productos de la actividad humana, en este caso ese producto supremo que es el conocimiento, y la responsabilidad implícita en la creación cognoscitiva, sus límites humanos.

Nuestro conocimiento del mundo es una construcción valorativa que nos permite crear un modelo o representación del mundo, pero no es el mundo. Es un producto humano que tiene fuentes y límites en la subjetividad humana y en la interrelación sujeto-objeto que no pueden pasarse por alto. El pensamiento moderno excluyó la subjetividad y construyó una objetividad basada en la exclusión del sujeto.

Ello dotó al conocimiento de un extraordinario atributo de poder y obligación. Durante demasiado tiempo consideramos que el mundo era como nuestro conocimiento –histórica y culturalmente limitado– afirmaba que era. De lo que se trata entonces es de considerar el lado de la subjetividad presente en todo conocimiento. Pero esto tiene una consecuencia filosófica sumamente importante: si el mundo humano es un mundo artificial, construido a partir del conocimiento, y si ese conocimiento es una resultante de la integración del sujeto y el objeto en los actos cognitivos, que cobran significación para el sujeto a partir de los valores involucrados, entonces no es posible afirmar una relación cognitiva objetivante que excluya al sujeto y lo trascienda.

Dicho de otra manera, el sujeto del cual estamos hablando no está obligado a postular (o a excluir) la existencia o la no existencia de una realidad que le era extranjera. Desde esta perspectiva, lo desconocido no es más que un conocible en instancia de actualización. Aunque también podríamos decir en «instancia de ser». ¿Por qué de ser? Por cuanto, si nos apoyamos en el término autopoiesis –acuñado por Maturana, Varela y Uribe–, podremos darnos cuenta, como lo afirma Von Foerster, que este señala un hecho fundamental que ocurre en todos los organismos vivos. En efecto, los componentes de estos están organizados de modo tal que los resultados de sus interacciones reproducen a esos mismos componentes, de allí la «autogeneración», la autopoiesis. Por esto concluye Von Foerster, que conocer sea «ser». En resumen, que el sujeto construye un «conocimiento de la realidad» que no es otro que el de su propia «experiencia de la realidad».

Sin pretender agotar el asunto, es importante que intentemos una respuesta a la interrogante ¿cuál es el alcance cosmovisivo de las nuevas teorías, del nuevo pensamiento emergente? Lo resumiré en cinco aspectos:

1 Se abre un espacio mayor para la comprensión dialéctica de la cognición humana como interrelación, donde se funden sujeto y objeto del conocimiento. Como han planteado algunos autores, la polémica del ser y el devenir, de Parménides y Heráclito, favorece a este último.

2 La complejidad no es una. Existen complejidades múltiples.

3 La emergencia de la nueva racionalidad científica ha planteado de modo radical y nuevo el problema de la artificialidad del mundo del hombre y el conocimiento. El valor del conocimiento, su estatuto propio y la correlación entre el sujeto, la subjetividad y el conocimiento objetivo. Ellas tienen especial importancia para la reelaboración de nuestra idea del mundo, en particular aquella que lo reducía a un conjunto más o menos concreto de entidades simples y discretas.

4 La apertura de una correlación nueva entre ciencia, valor y responsabilidad. La responsabilidad como un atributo inherente a la objetividad, orientado hacia la sociedad desde el interior de la ciencia, y no hacia la sociedad como algo externo a la ciencia.

La interpenetración y enriquecimiento mutuo de la filosofía y la ciencia, la comprensión del conocimiento como valor, junto a la necesidad de elaborar un saber científico transdisciplinar, han hecho posible el reconocimiento de la unidad de las ciencias naturales y sociales. El absurdo de esa división que atraviesa todo el siglo xx radica en que, como ha planteado T. Fung (2002), todas las ciencias son sociales, culturales e históricas. No hay ninguna que no lo sea.

El reconocimiento del carácter social de la cognición científica en todas sus dimensiones disciplinarias, y el avance hacia un saber transdisciplinar implica no solo la superación de la dicotomía clásica, positivista-poperiana y neokantiana de las ciencias naturales y las ciencias sociales, las ciencias duras y las ciencias blandas.

En la unificación del saber, un papel importante le corresponde a la reflexión teórica sobre la moralidad humana. Los avances que han tenido lugar en esta dirección se expresan de un modo más nítido en el desarrollo de la bioética como una nueva disciplina integradora.

5 El mundo no es de suma cero.40 El mundo no es una entidad completa, donde todo está hecho de antemano para que un sujeto cognoscente lo descubra y asimile en su proceso cognitivo. La naturaleza es creativa, y la emergencia de lo nuevo en ella es un asunto esencial que cualifica el nuevo paradigma.

La consideración de la creatividad de la naturaleza ha sido uno de los momentos de ruptura más importantes en la elaboración de nuevos ideales de conocimiento, y se ha expresado de manera efectiva en uno de los problemas cruciales de nuestro tiempo que cualifica el nuevo saber emergente: el problema ambiental.

Creo, que sin proponérselo, Luengo es uno de los, latinoamericanos,  que más le ha aportado a la cosmovisión de la complejidad, del que he recibido una gran influencia.

En el artículo Cosmovisión de la complejidad, sus enfoques, concluíamos diciendo:

La cosmovisión de la complejidad es la única cosmovisión que tiene una visión transdisciplinar en la que cada enfoque es independiente y ha sido desarrollado por especialistas de diferentes ramas, pero desde una misma cosmovisión (la complejidad). Su fuerza radica en la interrelación entre sus diferentes enfoques, en su diversidad y su profunda comprensión de los problemas contemporáneos y de la solución específica a los problemas desde una cosmovisión integral (sistémica) que mantiene en constante interacción entre los diferentes enfoques.

 

Imagen: Linkedin

 

 

 

 

 

Cosmovisión de la complejidad, sus enfoques

Fritjof Capra

Cosmovisión de la complejidad

Nace de los intentos generalizadores del pensamiento sistémico de Bertalanffy, de la comprensión del todo dada por el enfoque holístico y en especial de las concepciones filosóficas y sociales del pensamiento complejo de Morin, también se ha nutrido con las investigaciones en las ciencias de la complejidad, el paradigma ecologista y la bioética.  Busca comprender la inestabilidad como propiedad y la reconstrucción de las relaciones entre individuos, sociedad y naturaleza, desde el propio accionar humano en un mundo cada vez más inseguro y complejo.

Al igual que las demás cosmovisiones busca darle un sentido al futuro. ¿Hacia dónde vamos? Aunque hasta ahora no se ha visto como alternativa a los futuros escenarios del futuro, Ya que siempre se han clasificado como un enfrentamiento entre transhumanistas y bioconservadores, siendo los escenarios que conducen a un futuro posthumano los más elaborados. Pienso que la alternativa de la complejidad representa una de las cosmovisiones más importantes para servir de guía hacia un futuro sostenible.

Por otra parte es la única que busca un cambio de mentalidad y es la única que trabaja sobre una nueva forma de pensar desde la participación de todos con un enfoque transdisciplinar.

Cosmovisión de la complejidad como alternativa

Este tema nos introduce en la cosmovisión de la complejidad como alternativa a la cosmovisión ecológica (eco-centrismo) y las cosmovisiones del desarrollo sostenible y cosmovisión tecnologista (tecno-centrista) y sus variantes tecnoliberal y tecnodemocrática.  Sin dudas, el tema amerita una comprensión que venga a completar el paradigma de la complejidad: además del filosófico (método), el científico (ciencia), estamos ante la necesidad de desarrollar la cosmovisión de la complejidad, cuyo origen se remonta a Bateson y Capra.

Ya habíamos analizado las definiciones sobre cosmovisión y paradigma donde, de forma resumida, decíamos que el paradigma de la complejidad serian los principios que rigen a la complejidad y la cosmovisión las creencias y opiniones que llevan a cómo actuar en el mundo.

Cosmovisión de la complejidad, sus características

(Este trabajo se inspira el artículo de Enrique Luengo, “Las vertientes de la complejidad. Diferencias y convergencias”, pienso que lectura obligada. El artículo está disponible en los archivos del grupo Edgar Morin

Teniendo en cuenta las definiciones dadas en temas anteriores llamaremos cosmovisión a lo que Luengo llama paradigmas y utilizamos el concepto de paradigma para la definición global que da Maldonado a la complejidad. Entonces quedaría así:

Paradigma general de la complejidad y su tres paradigma restringidos

  • Filosofía de la complejidad. El Pensamiento complejo (paradigma de la filosofía compleja)
  • Ciencia de la complejidad. Herramientas para resolver los problemas propios del paradigma (paradigma científico de la complejidad)
  • Cosmovisión de la complejidad. Los diferentes enfoques ante los problemas actuales (paradigma de la cosmovisión compleja)

Y dentro de la cosmovisión de la complejidad se incluyen las diferentes vertientes, definidas por Luengo, las cuales considero como enfoques

Cosmovisión de la complejidad estaría compuesta por los siguientes enfoques:

  • Enfoque complejo (pensamiento complejo)
  • Enfoque sistémico
  • Enfoque holístico
  • Enfoque bioético (transdisciplinar)
  • Enfoque ecológico (desde la complejidad)

Donde la ciencia de la complejidad pasa a formar parte directa del paradigma de complejidad y se agrega un nuevo enfoque, el bioético.

En su artículo Luengo busca los principios y rasgos comunes que comparten las diferentes vertientes y asume que “estas características compartidas pueden ser el punto de partida para iniciar un dialogo prometedor entre las distintas vertientes de la complejidad” y propone las siguientes semejanzas o similitudes:

  • La complejidad como síntesis y potencial integrativo.
  • La visión inter y transdisciplinar.
  • La oposición a la ciencia normal o a la ciencia moderna convencional.
  • El estudio del cambio y el papel del tiempo.
  • La no-linealidad de la realidad y la incertidumbre.
  • La revisión de la causalidad clásica y la complejidad.
  • La capacidad autoorganizativa de los sistemas y el surgimiento de emergencias

Es bueno destacar que para Luengo, todas las vertientes de la complejidad son un camino en sí mismas y parecen no depender de las otras de ahí que hable de un dialogo entre cada vertientes las que, a su vez, comparten semejanzas y similitudes, las cuales las define como parte del paradigma de la complejidad.

Por otra parte afirma que cada vertiente en sus conceptos puede tener un matiz específico en cada una de sus aproximaciones. O sea cada una de las vertientes tiene su propio “enfoque”. Con respecto a la definición como paradigma de la complejidad, reconoce que no existe un acuerdo unánime en concebir complejidad como un nuevo paradigma, aunque la mayoría de los autores que se adscriben a alguna de las vertientes (enfoques) así lo reconocen.

Reitero que para este tema, partiremos de la definición de Maldonado del paradigma general de la complejidad y sus tres caminos y consideraremos al paradigma de la complejidad y las vertientes de Luengo, como cosmovisión de la complejidad y sus enfoques. Precisamente son las ideas de Luengo las que me han servido para describir las características de los diferentes enfoques de la cosmovisión compleja.

Continuamos con Luengo y las vertientes de la complejidad, ahora consideradas como enfoques: sistémico, holístico, complejo, etc. Para ello Partiremos de la tabla de elaborada por Luengo en el artículo, ya mencionado.

Veamos una de las advertencias que hace Luengo, en su artículo,  para comprender la tabla.

  • Quinto, también deberíamos considerar la postura subjetiva de quien elabora o propone la clasificación de las vertientes, pues lo hace desde una postura y una lectura en torno a la complejidad. Por supuesto, lo mismo ocurre en mi caso.

En la tabla las filas representan las características de cada vertiente (enfoque) y las columnas los enfoques. En este trabajo los enfoques representan las diferentes formas de enfrentar cada tipo de problema como parte de un sistema (cosmovisión de la complejidad)

Ahora describiremos las columnas (enfoques) e incluiremos algunas de las características de la tabla

Características de los enfoques (vertientes) de la cosmovisión (paradigma) de la complejidad (partiendo de la tabla elaborada por Luengo)

Enfoque Sistémico (problema tecnocientífico):

  1. Enfoque: Tecnocientífico
  2. Finalidad o apuesta: Ciencias y técnicas aplicadas a diversos ámbitos o campos
  3. Interés en una teoría general: Teoría general de sistemas
  4. Concepción sobre el proceso de cambio o transformación: Sistema y Transformación sistémica
  5. Implicaciones ético-políticas de la complejidad: Aplicaciones científicas y tecnológicas sistémicas sin profunda reflexión ético-política
  6. Apuesta por la reformulación en la organización de las ciencias y de las instituciones educativas: No necesariamente, sino aplicación de la teoría de sistemas en diversas áreas y favorecimiento interdisciplinar
  7. Algunas de sus tendencias o corrientes: Cibernética (Wiener) Cibernética de 2º orden (Von Foester) Teoría de la autoorganización (Ashby, 1962) Teoría general de sistemas (Bertalanffy, 1968) Sistemas dinámicos Sistemas complejos (García, 2006)
  8. Principales críticas entre las vertientes: Visión restringida de la complejidad. Suelen referirse más a sistemas que a complejidad. Referencias a sistemas complejos rara vez explicitados. Cierta ausencia de instrumentos en análisis (sistemas discretos, teoría de conjuntos, etc.)  En ocasiones, la complejidad se entiende como resultado sintético de múltiples interacciones. abordajes técnicos y metodológicos con lenguajes formales, matemáticos y computacionales.

Enfoque complejo (problema socieconómico):

  1. Enfoque: Ético – político (se parte del pensamiento complejo como filosofía)
  2. Finalidad y apuestas: Pensamiento, conocimiento alternativo y reformas de la vida
  3. Interés en una teoría general: Teoría general de la organización y principios generativos del conocimiento
  4. Concepción sobre el proceso de cambio o transformación: Totalidad organizada y proceso de metamorfosis
  5. Implicaciones ético-políticas de la complejidad: Reflexión profunda para actuar sobre la sociedad a la que Aspiramos (Antropolítica y política de civilización)
  6. Apuesta por la reformulación en la organización de las ciencias y de las instituciones educativas: Sí, a partir de núcleos organizadores de conocimientos. Ciencias del cosmos, de la atmósfera, de la tierra, de la vida, de lo humano, de la sociedad, de las civilizaciones, del conocimiento
  7. Algunas de sus tendencias o corrientes: Epistemología de la complejidad (Morin, 1982) Método general de la complejidad (Morin, 1977-2003)
  8. Principales críticas entre las vertientes: Énfasis en grandes teorías genéricas de corte filosófico y abstracto. Ausencia de uso en tecnologías de computación, de herramientas conceptuales y formales aplicables empíricamente. Discurso construido por antinomias o polaridades binarias. Excesiva consideración al desorden, azar, ruido, error e incertidumbre. Carencia de rigor científico, experimental e investigación empírica. Falta integrar los avances de la ciencia de la complejidad.

Enfoque holístico (problema psicoreligioso):

  1. Enfoque: Humanista y cosmovisión
  2. Finalidad o apuesta: Cosmovisión de la vida
  3. Interés en una teoría general: Teoría sobre concepciones de la realidad y su devenir
  4. Concepción sobre el proceso de cambio o transformación: Co-evolución holista (grandes escalas de tiempo)
  5. Implicaciones ético-políticas de la complejidad: Implicaciones ético-políticas sobre el estar y actuar en el mundo
  6. Apuesta por la reformulación en la organización de las ciencias y de las instituciones educativas: Sí, otra relación entre pensamiento científico y otro tipo de conocimientos; otro tipo de formación salud, consciencia y visión holística de la realidad física
  7. Algunas de sus tendencias o corrientes: Consciencia holística Salud holística Visión holística de la realidad física
  8. Principales críticas entre las vertientes: Necesidad de mayor rigor científico. Carencia de herramientas para estudiar procesos y estructuras. Riesgo de caer en la especulación metafísica. Falta autocrítica de su herencia posmodernista. Dificultades de operacionalización, aplicación e implementación empírica.

Enfoque ecológico (problema ecosostenible):

  1. Enfoque: Ciencias de la vida
  2. Finalidad o apuesta: Ciencias de los sistemas vivos
  3. Interés en una teoría general: Teoría general de los sistemas vivos. Teoría Gaia
  4. Concepción sobre el proceso de cambio o transformación: Relación sistema y entorno, evolución eco-sistémica
  5. Implicaciones ético-políticas de la complejidad: Implicaciones ético-políticas de la actuación de los humanos sobre su entorno natural
  6. Apuesta por la reformulación en la organización de las ciencias y de las instituciones educativas: Sí, relación de todas las áreas de conocimiento con los problemas ambientales
  7. Algunas de sus tendencias o corrientes: Ecología Teoría general de sistemas (Bertalanffy, 1968) Teoría de la evolución (Darwin) Termodinámica del no-equilibrio (Prigogine, 1945-77) Teoría de la autoorganización (Ashby, 1962)
  8. Principales críticas entre las vertientes: Diversas corrientes dentro del paradigma (algunas en continuidad con las ciencia normal y otras rechazando la ciencia normal; algunas articulando sólo ciencias y otras considerando saberes no científicos; algunas con crítica epistemológica y sus impactos ético y políticas y otras ausencia de crítica). Falta de claridad en la distinción entre ecología compleja y ecología a secas.

(Agregamos el enfoque bioético)

Enfoque bioético (problema biomédico)

  1. Enfoque: Ético y ciencia de la vida
  2. Finalidad y apuesta: Crear un puente entre la ética y las ciencias de la vida
  3. Interés en una teoría general: Teoría bioetica que abarque los diferentes dilemas contemporáneos. Bioetica global
  4. Concepción sobre el proceso de cambio o transformación: De la comprensión de los dilemas actuales construir un puente hacia el futuro para un verdadero progreso humano
  5. Implicaciones ético-políticas de la complejidad: Implicaciones del progreso tecnológico en el destino de la humanidad
  6. Apuesta por la reformulación en la organización de las ciencias y de las instituciones educativas: Se relacionan todos los problemas con una ética general de las ciencias de la vida (Bioetica)
  7. Algunas de sus tendencias o corrientes: Bioetica global, pensamiento transdisciplinar, enfoque sistémico-cibernético de las ciencias de la vida.
  8. Algunas de sus tendencias o corrientes: Tiene como defecto el concentrarse más en los aspectos médicos que en los grandes problemas propuestos por Potter. No tener en cuenta el impacto de las tecnologías conexas en el ser humano

Incluimos como cultura la ciencia de la complejidad, siguiendo a Luengo, pero no formaría parte de la cosmovisión sino del paradigma

 Ciencias de la complejidad:

  1. Enfoque: Científico
  2. Finalidad o apuestas: Ciencias para sostener la vida y enfrentar el futuro
  3. Interés en una teoría general: Teoría general o unificada de la complejidad
  4. Concepción sobre el proceso de cambio o transformación: Tiempo como Complejización (doble flecha del tiempo)
  5. Implicaciones ético-políticas de la complejidad: Aplicaciones científicas y tecnológicas para solución de grandes problemas humanos y naturales
  6. Apuesta por la reformulación en la organización de las ciencias y de las instituciones educativas: Sí, a partir de formulación de problemas de frontera. Ciencias cognitivas, de la salud, de la vida, del espacio, de la tierra, de materiales, de la complejidad.
  7. Algunas de sus tendencias o corrientes: Termodinámica del no-equilibrio (Prigogine, 1945-77) Teoría del caos (Lorenz, 1964) Geometría fractal (Mandelbert, 1977) Vida artificial Lagtun, 1987) Ciencias de redes (Berbani, Watts…) Lógicas no-clásicas (1950)
  8. Principales críticas entre las vertientes: Visión restringida de la complejidad con abordajes técnicos y metodológicos con lenguajes formales, matemáticos y computacionales. Riesgo de versiones simplistas en estudios sobre humanidades y ciencias sociales. Continuidad del dominio de las ciencias “duras”. No enfatiza en su epistemología la dimensión éticopolítica del conocimiento científico y sus aplicaciones. Riesgo de subordinar la complejidad al formalismo matemático o computacional.

Notar que las características para cada enfoque están enumeradas. Y cuando hablamos de problemas: tecnocientífico, socieconómico, etc., estamos haciendo referencia a los problemas definidos en artículos anteriores.

Algunas aclaraciones

(1) Enfoque: Varía acorde con el problema que enfrenta. Esto reafirma que cada enfoque, en la práctica, ha tenido mayor impacto en áreas determinadas, por lo que no funcionan como sistemas de propósito general sino como subsistemas enfocados a problemas determinados: problema tecnocientifico (sistémico), problema socieconómico (pensamiento complejo), etc. A su vez que la cosmovisión de la complejidad es el sistema que proporciona la compresión y el accionar en el mundo donde cada enfoque son, a su vez, componentes (subsistema) de la cosmovisión de la complejidad.

(5) Implicaciones: El sistémico dado su carácter tecnocientífico no es dado a las reflexiones ético-política, mientras el complejo, prioriza lo social, el ecológico el entorno natural y el holístico el estar y actuar en el mundo. Lo cual reitera como cada enfoque funciona como un subsistema enfocado a un tipo de problema

 (6) Tendencias y corrientes: Aquí se hace referencia al cuerpo teórico de cada enfoque y la corriente que ha generado. Es bueno destacar que cuando se hace referencia al pensamiento complejo, como enfoque dentro de la cosmovisión,  se está hablando del enfoque complejo como forma de entender y actuar sobre la sociedad. Otra cosa es el pensamiento complejo como método filosófico, y es que Morin fue tanto un filosofo como un sociólogo, por lo que no se quedo solo en querer comprender el mundo sino también en buscar una vía para transformarlo (cosmovisión).

Construyendo una nueva cosmovisión desde la complejidad.

La inconformidad con la solución que le dan a los problemas fundamentales de la humanidad las anteriores cosmovisiones lleva a la necesidad de encontrar una cosmovisión que busque el desarrollo del todo el potencial del ser humano. Se necesita de una cosmovisión que guie al ser humano en su camino (la vía) y son muchos los que han llegado a la conclusión de que el paradigma de la complejidad emergente tiene un potencial revolucionario de una amplitud sin precedentes. Como dice Morin: “El problema de la complejidad ha pasado a ser el problema de la vida y el vivir, al problema de la construcción del futuro y la búsqueda de soluciones a los problemas contemporáneos

La confrontación cosmovisiva

Mientras los sistemas filosóficos imponen sus ideas por sobre las demás, las que ven como superadas dentro de su sistema donde solo existen comparaciones que validan la superioridad de sus ideas a nivel teórico. La ciencia demuestra que sus ideas son las correctas al probar que las otras ideas no soportan la demostración científica, no son validas ante los conocimientos actuales (leyes). Las cosmovisiones se enfrentan a las ideas de otras cosmovisiones en la práctica y no tienen más opción que confrontarlas y que interactuar con ella, lo cual lleva, de alguna forma, a superarse a sí misma, producto de esa interrelación. Por lo que necesita aplicarse en el mundo. Su realización depende de las bondades (mejoras) con respecto a las demás cosmovisiones y la alternativa que ofrece.

La acción se logra por medio de las interacciones entre personas que logran una visión compartida de uno o más problemas contemporáneos y se van agrupando en torno a esa visión para actuar en conjunto (el observador en el mundo e interactuando con el entorno). La acción debe estar centrada en un objetivo (contexto). Las interacciones pueden ser colaborativas o competitivas. Por eso además de tener en cuenta los colaboradores que de alguna forma comparten la misma cosmovisión, hay que tener en cuenta los competidores (de otra cosmovisión) y los posibles enfrentamientos (la confrontación). La cosmovisión la complejidad debe ser vista como el camino para el accionar en la vida y de cómo enfrentar los problemas, nos conduce a la búsqueda de enfoques capaces de aportar una solución a cada problema.

La cosmovisión compleja debe colocar al ser humano (como ser consciente del universo, supra-conciencia), en el centro del universo (antropocentrismo de segundo orden), con la responsabilidad que esto implica para los humanos (como sus semejantes), para las especies y para el planeta. Al ser la especie más inteligente está comprometida a usar esa inteligencia a favor de todos.

Neoantropocentrismo: antropocentrismo de 2do orden. El sujeto se libera de las fuerzas externas y desarrollo su propia fuerza interior y es capaz de desarrollar todo su potencial, en armonía con su entorno.

La cosmovisión de la complejidad como una cosmovisión antropocéntrica de 2do orden

Se basada en la búsqueda de la manifestación plena del ser, como el ser humano que puede desarrollar todo su potencial y superar las limitaciones de su pensamiento egocéntrico y construir a un progreso verdaderamente digno.

 Cosmovisión de la complejidad. Los diferentes enfoques

Veamos lo que ofrece cada cosmovisión

Enfoque holístico: Se basa en proponer soluciones al problema de si la conciencia es reproducible o no. La trascendencia del ser humano desde su propio perfeccionamiento espiritual en interrelación con las tecnologías. Cosmovisión de la vida.

Enfoque (pensamiento) complejo: Además de eliminar la pobreza, se debe buscar el progreso individual y la creación de relaciones profundas (socialismo colaborativo). La raíz del problema es el cambio de mentalidad. Pensamiento, conocimiento alternativo y reformas de la vida.

Enfoque ecológico: Estamos ante la destrucción del planeta y de la vida entre quien es más rápido, el deterioro del planeta o la aceleración tecnológica. Ciencias de los sistemas vivos.

Enfoque sistémico-cibernético:  Controlar el progreso tecnológico y los riesgos o acelerar a las tecnologías y sus beneficios (sin tener en cuenta los riesgos). Ciencias y técnicas aplicadas a diversos ámbitos o campos

Dejé para ultimo el enfoque bioético por su importancia para la cosmovisión de la complejidad. Algunos pensadores de la complejidad asumen que la bioética está incluida dentro de la ecología, en mi opinión es al revés, el enfoque ecológico visto como dilema ético está incluido dentro de una bioética transdisciplinar en el caso de la ecología es la bioética global la que viene a ocuparse de los dilemas ecológicos. La bioética es la que debe definir las ventajas y desventajas de las mejoras tecnológicas, teniendo en cuenta lo que proponen las diferentes cosmovisiones.

La bioética trandiscipliar es la bioética desde la complejidad que busca la aplicación de la ética a los diferentes problemas y viene a dar apoyo ético a los diferentes enfoques de la complejidad.

Enfoque bioético: los dilemas que se le presentan a cada enfoque en la solución del problema que enfrenta y la comparación con la solución que dan las demás cosmovisiones. No estoy hablando de la bioética en sí misma, sino del papel de la bioética dentro de la cosmovisión de la complejidad como el puente entre todos los enfoques y que busca la supervivencia de la especia humana, tal como lo planteara Potter.

La cosmovisión de la complejidad es la única cosmovisión que tiene una visión transdisciplinar en la que cada enfoque es independiente y ha sido desarrollado por especialistas de diferentes ramas, pero desde una misma cosmovisión (la complejidad). Su fuerza radica en la interrelación entre sus diferentes enfoques, en su diversidad y su profunda comprensión de los problemas contemporáneos y de la solución específica a los problemas desde una cosmovisión integral (sistémica) que mantiene en constante interacción entre los diferentes enfoques,

 

 

 

Imagen:   Amazu.org

Los caminos del paradigma de la complejidad

“El paradigma de complejidad provendrá del conjunto de nuevos conceptos, de nuevas visiones, de nuevos descubrimientos y de nuevas reflexiones que van a conectarse y reunirse” (Morin, 1994).

El camino hacia una nueva forma de pensar.

Antes de entrar en el tema de la complejidad quisiera mencionar algunas ideas sobre la filosofía oriental de forma muy escueta.

La filosofía oriental propone que la mente humana sigue un ciclo evolutivo durante el cual se va superando a si misma pasando de una mente instintiva a un mente espiritual

Filosofía oriental

  • Mente instintiva
  • Mente intelectual
  • Mente espiritual

Si lo comparamos con la forma de pensar occidental tendríamos

  • Mente instintiva – Pensamiento Material. Tener más que los otros
  • Mente intelectual – Pensamiento Posicional. Lograr más cosas que los demás
  • Mente espiritual – Pensamiento Colaboracionista. Colaborar con nuestros semejantes con fines altruistas

Dado el carácter competitivo que se establece dentro del contexto actual (cosmovisión mercocentrista). Tendremos:

  • Material: Pensamiento basado en ganancia material a toda costa (fuerza bruta)
  • Posicional: Escalar mejores posiciones por medio de alianzas (más estratégico)
  • Cooperativo: Unión en torno a una visión compartida para un propósito de mejoramiento colectivo casi siempre implica la búsqueda de solución a los problemas actuales.

El pensamiento predominante se basa en ganar dinero a todo a costa o en posicionarse por encima de los demás, lo cual ha llevado a una cosmovisión mercocentrista (ley del mercado)

El camino hacia la realización en la filosofía oriental es alcanzar la mente espiritual (superar las mentalidades anteriores). Pienso que para la filosofía occidental debería ser alcanzar el pensamiento complejo/transidisciplinar que implica superar las formas de pensar anteriores

El paradigma social contemporáneo se soporta sobre la cosmovisión antropocentrista que dado el pensamiento competitivo imperante,  ya se material o posicional, nos arrastró a una economía de mercado, donde el ser humano es otro producto más dentro de la oferta y la demanda (cosmovisión mercocentrista)

Como alternativas al paradigma social imperante (la economía como eje central), han surgido:

Dentro del paradigma social vigente (la economía)

  • Socialismo (control de la economía por el estado)
  • Social democracia (equilibrio entre economía y estado)

Nuevos paradigmas que rompen con el paradigma vigente

  • Paradigma ecologista (poner a la ecología en el centro)
  • Paradigma tecnologista (poner a la tecnología en el centro del progreso)
  • Paradigma de la complejidad (superar las formas de pensamiento anteriores)

El paradigma de la complejidad  es el único que propone  como método comprender el pensamiento actual y sus errores, construir un nuevo paradigma científico que valide el nuevo pensamiento de la complejidad y busca construir una cosmovisión que desde la práctica supere la forma de pensamiento dominante del paradigma vigente

La aspiración de la filosofía oriental es alcanzar la paz espiritual. Para la filosofía occidental debería ser alcanzar la paz mundial, un mundo sin guerras, sin violencia, sin explotación, de seres humanos realizados. Pero para ello se necesita superar el pensamiento actual reduccionista, lineal, imperativo, egocéntrico y competitivo. Y hasta ahora, solo el paradigma complejo propone la vía para un nuevo pensamiento.

Los caminos hacia el paradigma de la complejidad

Según Luengo, Vivimos un mundo cambiante, con un muy elevado ritmo y que adopta velocidades crecientes, un mundo alta y crecientemente complejo y por lo tanto no lineal. Es cuando descubrimos un mundo dinámico, imprevisible, con múltiples conexiones, un mundo además irreversible, como siendo simultáneamente un mundo finito, entonces, aparece la complejidad y es necesario una ciencia para explicarlo, un pensamiento para afrontarlo; pues lo que se yergue ante nosotros es un mundo polifónico, hologramático y de ubicuidades (yo agregaría y una cosmovisión para actuar en el mundo)

Existe cierta confusión cuando se habla de pensamiento complejo, de método, de cosmovisión, de pensamiento sistémico, de paradigma general, paradigma restringido, etc.

Paradigma general de la complejidad comprende los diferentes paradigmas restringidos

  • Filosofía de la complejidad / Pensamiento complejo / El método
  • Ciencia de la complejidad / Paradigma científico de la complejidad
  • Cosmovisión de la complejidad / Pensamiento sistémico

Ahora veremos cómo importantes pensadores latinoamericanos definen los caminos hacia la complejidad

En el proceso de configuración de la complejidad como forma de racionalidad, es posible identificar tres caminos distintos de pensamiento. Caminos que podemos denominar la lógica de la complejidad: la complejidad como método, la complejidad como cosmovisión y la complejidad como ciencia o las ciencias de la complejidad (Maldonado).

La complejidad como método es conocido como pensamiento complejo, y se condensa en la obra de E. Morin, la complejidad como cosmovisión comprende a la Escuela de Palo Alto (E.E.U.U.), con G. Bateson como su más claro representante; la complejidad como ciencia es la rama más amplia e importante y está representada por I. Prigogine, H. Maturana, F. Varela, S. Kauffman, P. Bak, CH. Langton y muchos otros. Estos tres caminos de la complejidad articulan manifiestamente la lógica de la complejidad en maneras y en grados bastantes diferentes (Maldonado)

El problema genérico de la complejidad en sus tres vertientes (caminos) es el de explicar el mundo y retomar el control de la historia, y esa es una tarea eminentemente científica, esto es, epistémica (Luengo)

Paradigmas restringidos (Luengo)

  • Paradigma científico de la complejidad – Tema para las ciencias contemporáneas
  • Paradigma filosófico de la complejidad – Tema para la reflexión filosófica, ética y política
  • Cosmovisión de la complejidad – Tema para comprender desde otras miradas, en el espacio entre las fronteras del conocimiento científico y no científico: como la salud, la psique humana y diversos tipos de cosmovisiones para estar y actuar en el mundo.

 Retomando las definiciones de Maldonado de la cosmovisión en su articulo

La complejidad como método. La expresión hace referencia, notablemente, de la obra de Edgar Morin y de sus discípulos y seguidores. La manera más amplia como es conocida es en términos del pensamiento complejo. De acuerdo con esta interpretación, la complejidad consiste en un método de aproximación al mundo, a los fenómenos y al ser humano. Esta es, con seguridad, la versión más popular y extendida entre el gran público –en el sentido más amplio de la palabra- en el mundo hispanohablante.

La complejidad como cosmovisión. Aquí se reúnen varios autores provenientes, todos, del enfoque sistémico. Incluye nombres como F. Capra, von Bertalanffy, von Foester, H. Maturana, G. Bateson y en general toda la escuela de Paloalto, en California. Hay que decir que la mayoría de los textos recientes en el mundo sobre “complejidad” combinan numerosos elementos sistémicos y se inscriben, en realidad, dentro de este modo de comprensión.

La complejidad como ciencia. Incluye los trabajos de los teóricos e investigadores del Instituto Santa Fe, en Nuevo México (E.U.), los trabajos de I. Prigogine, y en general de la Universidad Libre de Bruselas (U.L.B.), en Bélgica, y de varios otros centros e institutos de investigación en el mundo, así como la obra más reciente de I. Wallerstein.

Los diferentes caminos

Filosofía de la complejidad – Pensamiento complejo (método)

La complejidad vista como método tiene nombre propio: Edgar Morin. El método expuesto por el padre del pensamiento complejo “consiste en poner al descubierto un universo cambiante frente al cual la ciencia, el pensamiento o la cultura anteriores o normales ya no son suficientes” (Maldonado, 2012). Dicho con otras palabras, el pensamiento complejo entraña un modo de aproximación al mundo y al ser humano, que rechaza cualquier intento de interpretación simplificada y reduccionista. De ahí que, en palabras del mismo Morin, “el paradigma de complejidad provendrá del conjunto de nuevos conceptos, de nuevas visiones, de nuevos descubrimientos y de nuevas reflexiones que van a conectarse y reunirse” (1994).

Pensamiento complejo, cuando se trata de construir un método nuevo sobre la base de las ideas complejas que emanan de las ciencias y su conjugación con el pensamiento humanista, político social y filosófico, como es el caso del pensador universalista francés Edgar Morin. También se utiliza pensamiento complejo en un sentido más estrecho, para designar a los estudios científicos que intentan explicar las dinámicas complejas de los objetos en estudio, sin extraer de ello consecuencias cosmovisivas o metodológicas más generales. Edgar Morin ha denominado esta postura complejidad restringida, para diferenciarla de aquella más amplia y humanista que sostiene, donde lo define como un método de pensamiento nuevo, válido para comprender la naturaleza, la sociedad, reorganizar la vida humana, y para buscar soluciones a las crisis de la humanidad contemporánea.

Cosmovisión de la complejidad – Pensamiento sistémico

 La complejidad como cosmovisión. La segunda comprensión de la complejidad está formulada por G. Bateson. Se le denomina pensamiento sistémico; de hecho la Escuela de Palo Alto en California, es importante por la introducción del pensamiento sistémico en toda la línea de las discusiones y en los modos mismos de trabajo científico. Desde el punto de vista del enfoque sistémico, “la complejidad es una cosmovisión que le adscribe un papel determinante al sujeto, denominado genéricamente como ‘observador’. De acuerdo con esta línea de interpretación, la complejidad del mundo es relativa al punto de vista del observador” (Maldonado, 2009), y así es como, a través de relaciones, nodos y sinergias, se procura que todas las piezas del rompecabezas tengan cabida dentro de un todo coherente.

Hay que decir que la mayoría de los textos recientes en el mundo sobre “complejidad” combinan numerosos elementos sistémicos y se inscriben, en realidad, dentro de este modo de comprensión. Propiamente hablando, aquello que caracteriza al pensamiento sistémico en general es que si bien ve relaciones, dinámicas, sinergia, finalmente busca que, por así decirlo, todas las piezas del rompecabezas cuadren perfectamente en un todo coherente. Desde el punto de vista de la filosofía de la ciencia, es adecuado comprender al pensamiento sistémico y en general a la complejidad como cosmovisión, como un pensamiento (o lógica) coherentista – exactamente en la línea defendida por Ramsey o N. Rescher.

Lo complejo equivale en este sentido a la clase, totalidad, estructura o conjunto; sistema de relaciones internas que lo convierten en un todo cerrado y autónomo y que nos permite hablar de complejo físico, sociológico, causal, de sentido, etc. En tanto que la complejidad como ciencia sobreentiende las circunstancias que concurren necesariamente en virtud de su propia estructura.

La contribución más grande de la escuela de Palo Alto es la configuración de verdaderas áreas de trabajo científico como propiamente sistémicas: existe una psicología sistémica, una comprensión del sistema de la salud, una administración de empresas sistémica, y otros. Pero como tal, el pensamiento sistémico es diferente de la complejidad, y de la complejidad como ciencia.

En «La trama de la vida» de F. Capra, se desarrolla una presentación de los antecedentes históricos y conceptuales del enfoque sistémico, en el se aprecian los dos niveles centrales de trabajo de los enfoques sistémicos, los sistemas naturales y los artificiales, en una presentación de entrelazamiento e interdependencia entre ambos niveles.

Ciencias de la complejidad – Paradigma de la ciencia de la complejidad

 A diferencia del pensamiento complejo y del enfoque sistémico, Maldonado afirma que las ciencias de la complejidad tienen un significado, una importancia y una extensión perfectamente diferentes y más amplios que los dos anteriores, semejante a una caja de herramientas que permite entender y explicar qué es la complejidad y en qué sentido, cómo y por qué se han vuelto complejas las cosas, el mundo, la sociedad y la naturaleza (2012). Se trata de una búsqueda irrenunciable e inaplazable, si se acepta que “el hombre es un suceso del mundo que cree tener la facultad de tirar de los hilos de su propio drama, algo que, naturalmente, depende del conocimiento que aquél haya conseguido de sí mismo y del resto del universo. Es por eso que inventa ideologías y confecciona utopías” (Wagensbert, 2007).

Ciencias de la complejidad, cuando se trata de investigaciones que en diversos campos hacen avanzar el conocimiento científico al introducir una comprensión del mundo como sistema entrelazado. Estos estudios científicos, auxiliados de potentes dispositivos computacionales han avanzado en la creación de modelos para explicar los comportamientos de los sistemas en el tiempo, con lo que se han abierto nuevos campos de investigación, y nuevas herramientas para comprender este tipo de sistemas. Se forma a partir de estos estudios, indirectamente, una comprensión del mundo como sistema entrelazado, que exhibe propiedades completamente nuevas y sorprendentes, como la no linealidad, o nuevas formas de determinación como el caos determinista. El aporte principal de estas teorías consiste en el avance del conocimiento de los sistemas específicos, y la creación de modelos y simulaciones computacionales que permiten comprenderlos como entidades no reducibles a relaciones causales simples.

Retomando las ideas de la filosofía oriental tendremos

El paradigma filosófico, científico y el cosmovisivo representan los diferentes caminos para la transformación del pensamiento humano

  • El camino de la sabiduría (las ideas que rigen el mundo). El conocimiento
  • El camino del conocimiento (las leyes que rigen el mundo). La demostración de los fenómenos complejos y su generalización
  • El camino de la acción (las interacciones que rigen el mundo). La actuación ante los problemas cada vez más complejos y cómo enfocarnos ante cada tipo de problemas

La filosofía de la complejidad nos enseña a pensar a comprender la complejidad del mundo

La ciencia de la complejidad nos enseña a razonar a comprender las leyes de la complejidad

La cosmovisión de la complejidad nos enseña a actuar a comprender las interacciones y las confrontaciones  en el mundo.

Las 3 de alguna forma nos ensenan a superar las formas de pensamiento anteriores y a construir una nueva forma de comprender, analizar y actuar en el mundo, que garantice un progreso humano verdaderamente digno, como lo soñara el bioeticista Potter

El camino, es superar la formas actuales de pensar.

  • La filosofía de la complejidad superar el pensamiento reduccionista, lineal, cognitivo (se concentra más en el pensamiento filosófico, social y político)
  • La ciencia de la complejidad (influenciado por el paradigma filosófico) quiere superar las formas de comprender las leyes del pensamiento complejo y descubrir nuevas leyes y forma de superar las ciencias vigentes (se concentra en las leyes de la ciencia).
  • La cosmovisión de la complejidad desde la praxis y el confrontar las cosmovisiones modernas, busca superar los problemas actuales desde una cosmovisión que le encuentre solución a los problemas contemporáneos y supere el pensamiento individualista y competitivo actual (se concentra en el sujeto, en su lucha por cambiarse a sí mismo y al mundo)

 

Imagen: Entrevista A